Con la salida al cosmos de Yuri Gagarin dimos comienzo a un nuevo tipo de período histórico. En este momento, el nuevo periodo, se realiza en un lapso de tiempo real histórico, que pasa a ser sorpresivamente rápido.
Ahora el hombre comienza a vivir masivamente en otro mundo, en el infinito universo de las órbitas celestiales, se siente allí como si se hubiese trasladado a un orbe que tiene una nueva dimensión. En este nuevo mundo se llenan de aire unas enormes plataformas orbitales, medidas en kilómetros.
Aparte de vivir anteriormente en la Tierra con las tres dimensiones tradicionalmente conocidas, en aquel lugar cósmico, por no tener peso casi todo le es diferente. El hombre adquirió una especie de nueva dimensión, con la que ahora puede volar mejor que el cóndor.
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